Hace unos días, en este mismo
espacio, celebrábamos a un maestro del ingenio teatral y literario que fue
Shakespeare… y este pasado jueves le hemos rendido nuestro homenaje al famoso
Cervantes… ambos tiene su cita en el día del libro, 23 de abril, que también es
la fiesta de nuestra comunidad autónoma… Y hoy mismo dedicamos nuestra
felicitación a las madres, siempre importantísimas y maravillosas en la
regeneración de la vida…. Y en la implantación del amor… y también es el día
dedicado al trabajo… que hoy ha dejado de ser castigo divino para ser tesoro
buscado y anhelado por todos…
En la sesión de este año
dedicada a Don Miguel, tratamos la “novela ejemplar” “La Gitanilla”… que todas
y todos habéis leído… y que recordáis que empieza…
“Parece que los gitanos y gitanas solamente nacieron en el mundo
para ser ladrones: nacen de padres ladrones, críanse con ladrones, estudian
para ladrones y, finalmente, salen con ser ladrones corrientes y molientes a
todo ruedo; y la gana del hurtar y el hurtar son en ellos como accidentes
inseparables, que no se quitan sino con la muerte.”
Con sus divertidas historias
entrecruzadas, el autor del Quijote, nos pone en bocas y ejemplos unos sabios
consejos con los que ir enfrentándonos a esos momentos de pasión y emoción que
la vida nos presenta… y que debemos afrontar con la debida serenidad y buen
pensar para salir airosos y no cometer absurdas e innecesarias insensateces…
Y para terminar… el terminar de
la Gitanilla… con sus ultimas aclaraciones a los avatares pasionales que
intenta remediar Don Miguel…
“Olvidábaseme de decir cómo la enamorada mesonera descubrió a la
justicia no ser verdad lo del hurto de Andrés el gitano, y confesó su amor y su
culpa, a quien no respondió pena alguna, porque en la alegría del hallazgo de
los desposados se enterró la venganza y resucitó la clemencia.”
Escrito por: Javier
Morera
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