La última sesión de enero comenzamos
el Ciclo
de Biografías con Vincent van
Gogh… nos sumergimos en su vida, sus cartas (su mayoría enviadas a su
querido hermano Theo) y por supuesto en su amplia, variada, colorida innovadora
y sensible mirada… para terminar disfrutando de esa obra de arte que es la
película “Loving Vincent”.
Para acercarnos un poco a van
Gogh, comparto algunos fragmentos de sus cartas a Theo:
<No
conozco mejor definición de la palabra Arte que ésta: “El arte es el hombre
añadido a la naturaleza”. La naturaleza, la realidad, la verdad, pero con un
significado, con una concepción, con un carácter que el artista hace resaltar,
y a los cuáles da expresión, desgaja, libera e ilumina.> (130)
<En vez de abandonarme a la desesperación, tomo el partido de la
melancolía activa mientras sienta necesidad de actuar, o en otros términos,
prefiero la melancolía que espera, aspira y busca, a la que, abatida y
estancada, desespera. > (133)
<Por encima de todo, quiero alcanzar un punto en el que se diga de mi
obra: Ese hombre tiene una sensibilidad muy delicada. Pese a mi reconocida
torpeza, o a causa de ella, ¿me comprendes?.> (218)
<El colorido es para el cuadro lo que el entusiasmo para la vida, y por
tanto nada insignificante que no se intente conservar”> (443)
<A veces me siento ya viejo y, fracasado, y sin embargo, lo bastante
enamorado todavía de la pintura para no perder el entusiasmo por ella. Sólo que
para triunfar, se necesita ambición, y la ambición me parece absurda. >
(462)
<Por momentos, cuándo la naturaleza es tan bella como estos días, tengo
una lucidez terrible; entonces dejo de sentirme, y el cuadro me viene como en
un sueño. > (543)
<Porque en verdad, nosotros sólo podemos hacer hablar a nuestros
cuadros. Pero, sin embargo, querido hermano mío, hay esto que siempre te he
dicho y una vez más repito con toda la gravedad que puede dar el esfuerzo de un
pensamiento constantemente orientado en tratar de hacer las cosas lo mejor
posible: Vuelvo a decirte que siempre te consideraré algo más que un simple
marchante de Corots, y que a través de mí tienes tu parte en la producción de
ciertos lienzos que, incluso en la
catástrofe, conservan su calma…> (652)
Tenía mucha paciencia, una gran
fuerza interior, una profunda sensibilidad para captar las emociones de esa
realidad… conseguía que los colores conversaran entre ellos… Fue un genio que
nadie valoró en su tiempo…
Escrito por: Eva Morera
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