Este
jueves 14 hablaremos sobre la figura del poeta internacional chileno, no es
fácil abarcar en un solo texto todo lo que representó, lo que representa, lo
que representará... Muchos los conocerán por sus poemas de amor y guerra, más
de amor que de guerra, el famoso verso me gusta cuando callas porque estás como
ausente, o aquel melancólico puedo escribir los versos más tristes esta
noche...
Eso es
lo que nuestra cultura popular nos ha dejado del gran poeta chileno, aquel
hombre orondo, enfundado siempre en su sombrero y fumando su pipa, eso es lo
que nos ha quedado de él.
Lo que
no cuentan del “vate” es que ayudó a salvar a más de dos mil españoles de la
muerte, luchando también contra su país, que escribió un libro que se llamaba
España en el corazón, que fue intimo de otros poetas como su querido y
malogrado Lorca, de su esporádico compañero de viajes Alberti.
Conoció
a Miguel Hernández, Cernuda, Alexandre... fue amigo de Negrín. Aunque
probablemente los que nunca lean este post no lleguen a conocer ni la mitad de
estos nombres que se mencionan. Su ciudad predilecta aparte de Valparaíso era
Toledo. Vivió en Madrid y Barcelona. Y hasta su muerte como en el título de su
libro, tuvo una parte de España en su corazón.
Como
intelectual y comunista, esos de los que la derecha dice que un día con ellos
llegaría el apocalipsis; fue perseguido, condenado al destierro o a la muerte,
pero él siguió luchando con su pluma, sus influencias, ayudando a que la
primavera siguiera aunque cortaran todas sus flores.
Se
ocultó entre las casas de la gente humilde, escapándose, refugiándose entre la
hospitalidad obrera del pueblo chileno que le salvó de su posible final
anticipado. Fue aquella generosidad de los mineros, campesinos y pescadores;
muchos de los cuales sin saber leer, valoraron todo lo que había luchado y
escrito de ellos. Se exilió a Europa, regresó de nuevo a Chile recibido como un
héroe, viajó por toda América Latina, llenó estadios de fútbol en Brasil
recitando poemas, esos mismos estadios donde ahora ovacionan a jóvenes sacados
de las favelas que se labran su fama a través de goles y no de poesías. Y puede
que en este tiempo hayamos caído en este error, cambiar la poesía por goles...
Escrito por: Chema B.
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