Hace unos días, escribíamos de Shakespeare, del día del libro en Aragón, de las tragedias y de Hamlet… Terminamos citando a ese médico que revolucionó el pensamiento occidental con sus “instancias” y explicaciones sobre la formación de la personalidad humana y las fuerzas inconscientes que dominan nuestra conducta… Estoy refiriéndome a Sigmund Freud, el austriaco, que fundó el Psicoanálisis y que precisamente nació el 6 de mayo de 1856, hace ahora 165 años y tres días.
Es muy interesante leer sus obras, aunque no son novelas. Es mejor aún, leer antes a los que le comentan con mas capacidad divulgativa que su profundidad académica… para entenderlo… para entendernos… para entender las capas y escondrijos que nuestras relaciones intrapsíquicas y sociales esconden y sufren…
El 9 de mayo de 1860, al otro extremo de Europa, en Escocia, nació James Matthew Barrie, un escritor que nunca creció mucho, pero nos llevó con su niño perenne que llamó Peter Pan, al país de Nunca Jamás…
Freud y Barrie fueron coetáneos e intelectuales de esa misma Europa, pero dos personalidades muy distintas. Pertenecientes a geografías y contextos culturales muy diferentes… con trayectorias que solo tienen en común el trabajo que han dejado como legado a esta cultura donde estamos…
Si James Mattew Barrie de mayor, hubiera leído el Psicoanálisis de Freud, seguro se hubiera auto entendido mas…
Si Freud lo hubiera sentado en su diván de Viena, tal vez le hubiera cambiado… y sus tristezas y dificultades se hubieran minimizado… y no tendríamos a su “niño eterno” que nos acompañará siempre en esta sociedad de inmaduros e incoherentes adolescentes postmodernos…
¿Qué sería de nuestra cultura sin tantos Peter Pan que solo quieren divertirse sin crecer?...
¿Qué harían las Wendy sin cuidar a sus Peter Pan cuarentones?
Escrito por: Javier Morera
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