“Otras enseñanzas se me grabaron más profundamente aún. Oí
hablar de la diferencia entre los sexos y del nacimiento y crecimiento de los
niños; cómo encantan a los padres las sonrisas de sus hijos menores y la
animada charla de los mayores, cómo las madres dedican vida y cuidados a tan
preciosa carga, cómo la mente infantil va profundizándose y aumentando sus
conocimientos. Supe también cuál es la relación entre hermanos, hermanas y
otros grados de parentesco que unen mutuamente a los seres humanos”.
¿Te parece que es un fragmento
de la obra de Edgar Rice Burroughs, Tarzán?... sigue leyendo…
“Pero no pude menos que preguntarme donde estaban mis amigos y
mis parientes. Jamás padre alguno vigiló mis días de infancia, ni hubo madre que
me bendijera con sus sonrisas y sus caricias. Y, si los hubo, toda mi vida
anterior era una eterna noche, un vacío total en el que no distinguía nada.
Hasta donde recordaba mi memoria, he sido siempre como lo era entonces, en
estatura y en proporciones. Nunca había visto ser alguno que se me pareciera o
con quien me ligara lazo de ninguna especie. ¿Qué era yo? Presentábaseme una y otra vez la duda a la que solo podía contestar con
gruñidos.”
¿Te parece que es un cuento
surrealista o una versión de E.T. que
busca su casa y sus padres como “Inteligencia Artificial”?…
En realidad son citas de un
libro escrito hace casi doscientos años… romántico por época, pluma y
significados… y nos hace reflexionar sobre muchas cosas… como la ciencia… la
religión…. Las relaciones sociales… y muy especialmente nos presenta el eterno
problema de la soledad… de encontrar pareja… de sentirse querido desde la
infancia hasta la sexualidad más adulta… desde el conversar hasta el convivir…
desde la educación hasta la descendencia…
Si somos monstruos nos
quedamos solos… y si nos quedamos solos con nuestras manías y egoísmos…. Nos
hacemos monstruos…
¿Cuántas cosas interesantes
nos relató esa jovencita romántica y apasionada que fue Mary Shelley en su
librito “Frankenstein”…. Y que bestias los “adaptadores” de cine que han convertido a este pobre
desgraciado en un asesino en serie… El problema de este solitario personaje,
como el de Rambo y tantos otros, es que lo fabricaron… y luego no sabían que
hacer con él… Algo parecido a los que les damos veinte años de instrucción durísima
y selectiva entre escuelas, institutos y universidades y luego los dedicamos a
repartir publicidad sobre mentiras por los buzones… también se sienten muy
solos y estafados por todos los que les hemos engañado como al pobre Franki que
solo quería una pareja para ir pasando las aburridas tardes de invierno…
Escrito por: Javier Morera
1 comentario:
Que bueno, qué triste, y qué real.
¡y cuántos Frankenstein estamos creando, entre tanto egoísmo, ambición, racionalismo, y creencia científica...!
En fin, lástima que sean pocos los que te escuchen esta tarde, pero hay que entender que la mayor parte de las personas tienen importantes tareas en las que ocupar su tiempo, que se acerca el verano, y hay que estudiar selectividad, mantener la operación vikini, y quien sabe qué más ¡Como para hablar de monstruos decimonónicos! En fin, cuando sean monstruos, ya les daremos tratamiento antidepresivo, que la ciencia lo soluciona todo.
Muy interesante la relación con Rambo, me ha abierto los ojos una vez más... da para "otro punto"... ¡ya sacaré el tema por la tarde!
Eloy Morera.
Publicar un comentario